martes, 6 de noviembre de 2007

Desde mi ventana

Desde mi ventana veo como anochece, el cielo va perdiendo poco a poco su tono azul, pasando a un verde esmeralda y oscureciendo cada vez más, hasta llegar al su color característico, violeta, entre las nubes celestes que surcaban el cielo, comenzaban a salir las primeras estrellas con sus distintas tonalidades, azul, verde, amarillo, ya casi aprendo todas o al menos esa es mi intención aunque creo que es un poco difícil con la inmensidad que debe haber detrás de este cielo.


Entra un pequeña brisa por mi ventana, la cortina se mueve y toca mi rostro, casi acariciándolo, es como si el viento estuviera invitándome a bailar, siento en mi piel la frescura de la noche, con sus aromas de primavera, se puede sentir claramente el olor a azahar que viene del jardín, es uno de los olores que mas me gustan, es como si pudiera tocarlo y la habitación se impregna a él, llevándome a otro mundo donde los olores marcan las formas de las cosas.


Escucho como los animales nocturnos empiezan a despertar, como el grillo canta en alguna rama cercana, el comienza una sinfonía con los demás, llegando a mis oídos la más bella tonada que he escuchado y comienzan a brillar entre la yerba lejana las luciérnagas, sus colores llenan este mundo de penumbras en una pequeña fiesta.


Puedo sentir claramente todo a mi alrededor, puedo darle colores a la noche no solo disfrzarla, sino tambien maquillarla con diversos matices.


Puedo imaginartodo ese inmenso mundo solo desde mi ventana.


1 comentario:

Raul dijo...

Has leido "La Continuidad de los parques"?