domingo, 2 de marzo de 2008

De Noche

-Espera Elen- se escucha un susurro entre los árboles.
- Que alguien me hablo??- se pregunta, no veo a nadie por aquí, y sigue caminando grácilmente entre los árboles.
-Elen…

Solo escucha el susurro en su oído, quien fuera estaba tapándole la boca y la tomaba de la cintura acercándola a su cuerpo.

-No grites por favor – seguía susurrándole al oído – solo quería hablar contigo a solas , no hagas nada extraño

Asiento con mi cabeza, mi corazón corría a mil por hora, el cuerpo de esa persona era cálido y sus manos la abrazaban fuertemente, su aliento recorría mi mejilla, se notaba un poco agitado como si hubiera estado corriendo.

Lentamente pero sin soltarme me giro quedando frente a frente, era mucho más alto que yo, y me miraba con esos ojos profundos, como si examinara cada parte de mi cuerpo, me sentí hipnotizada y a la vez avergonzada, sentía como mis mejillas aumentaban su calor suponiendo que estaba completamente colorada.

Comenzó a acercar su rostro lentamente al mio, no sabía como escapar y a la vez no quería, nuevamente me susurro al oido palabras que no esperaba escuchar.

-Se mia…No puede evitar sentirme alagada, aterrada y conmovida, comenzó a bajar con su boca por mi rostro buscando lentamente mis labios, ya era imposible resistirme, el beso fue largo y apasionado, sus manos comenzaron a recorrer mi cuerpo mientras yo lo abrazaba, sin poder evitar dejar escapar sonidos de mi labios, de verdad estaba disfrutando el momento.

Se escucho un golpe en la división, era de noche. Y yo me había caído de la cama.

1 comentario:

Raul dijo...

Incubus pasó a verte!